Repudio

La historia de los trabajadores argentinos tiene una larga lista de victimas. Ahora tenemos que lamentar otra más, Mariano Ferreyra, un militante de 23 años del Partido Obrero (PO), murió y otras dos personas resultaron heridas de bala tras una pelea entre empleados ferroviarios y sectores gremiales de la Unión Ferroviaria (UF), que quisieron interrumpir la protesta.

Otra muerte inútil debido a la brutalidad de quienes quieren imponer la fuerza para dirimir controversias políticas. En un momento de expansión y mejoras laborales. donde los trabajadores tenemos la chance de discutir en paritarias y además, ya está en las comisiones parlamentarias el proyecto para dedicar un 10 % de las utilidades de la renta que obtengan las empresas para distribuir entre los empleados, hace que no se comprenda semejante desatino.

Esta es una muestra más de los nichos de violentos que conviven en nuestra sociedad. Repudiamos fervientemente estos actos y nos solidarizamos con los familiares de Mariano y tantos compañeros que reclaman en paz por sus derechos. Esperamos que el poder judicial pueda hallar en un plazo breve a los responsables de este crimen para encarcelar a quienes practican atentando sobre la convivencia ideológica. Estos sujetos son intolerantes y peligrosos por eso deben estar presos.